Estamos de fiesta y para mi es un dìa cualquiera, mejor dicho, un dìa laboral. Hace mucho que no descanso feriados, salvo el año pasado que fui a Huanuco, contra todo pronòstico. En cambio, este 2010 no siento el mismo fervor de siempre, quizà porque todos viajaron, todos celebraban y yo me quedé en mis laureles...
Era medio dìa (del 28 de Julio) yo llegaba tarde al diario y escuchaba por radio el mensaje de Alan. No acostumbro escuchar porque me aburre pero ya estaba pegada en él desde mi casa y justo tocó el tema del seguro de salud, lo que muchos peruanos no tienen, me incluyo. Y dentro de mí me preguntaba; ese presidente de allí se dirige a personas que sufren de diabetes, de presión alta, algunos cancerígenos, otros males terminales hasta de desnutrición ¿Y él? ¿de qué mal sufre? Es un hombre que come de todo, donde va no le falta comida y en su casa y Palacio de Gobierno come como rey...un hombre de contextura demasiado gruesa. Mi papà no es tan gordo pero sufre de presión alta, de problemas en la piel, como cualquier humano...en cambio Don Alan García, el señor que tiene toda la plata que siempre ha querido años tras años....él no sufre de nada señores, es un hombre que si llora, se acuerda de todo el dinero que tiene guardado y se olvida del sufrimiento, si se puede decir...no respeta a su mujer, nuestra primera dama....es así ¡Estamos en el Perú! lugar donde no se respeta nada ni la salud de los más pobres y no pobres. Por eso digo, y también lo dijo un colega mío: "Yo amo al Perú pero no a muchos que habitan en el", si señores, soy anti-patriota, solo por este día.
No hay comentarios:
Publicar un comentario